Por si alguien se lo ha perdido, os comparto mi colaboración con El Poder de las Letras de esta semana. ¡Besitos!
Me siento como si fuera un gato negro. Uno de esos pobres animalitos que la gente rehúye porque piensan que les va a dar mala suerte. ¡Pobrecitos! Si supieran lo cariñoso que puede llegar a ser un gatito negro… Así, veo cómo cada vez que intento acercarme a ti, tú te alejas, como si fuese […]
a través de Como aquel gatito negro — El poder de las letras
He dejado un comentario sentido en el post original
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😉
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Todos tenemos en el alma un pedacito de ese gatito negro. Yo no lo vivo mal, con él siempre tengo compañía. Un saludo cordial para ti y tu gato
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Gracias Marisa por leerme. Un beso
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No puedo abrir el enlace desde el móvil, a ver si me acuerdo cuando pille el portátil 😂
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Mejor por que es un vídeo y te comerá demasiados megas. 😉
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Me encantan los gatos, ahora tengo un gatito mi loki de los llamados romanos, pero tuve un gato negro como la noche, con andares felinos que me tenía cautivada, le puse Mogur, por el personaje de un libro que leía por aquel tiempo, paseaba conmigo por la plaza, parecía un perrillo. Un día un perro se tiró a él y me lo mató. Lo pasé fatal, pero sigue en mi recuerdo.
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Jo qué mala suerte. Además que son de la familia y el duelo es horroroso. Yo no tengo, me encantaría un gatito o un perrito, pero no me dejan… Un beso
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No comenté en la original, así que lo hago ahora.
Muy tierno el paralelismo, y triste a un tiempo. Aunque el párrafo final abre la puerta a un futuro posiblemente brillante. Adopción de un gatito, real o metafórico, igual da; seguro que da alegrías a la protagonista 😀
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Me pareció haber visto un lindo gatito… cuando tenga uno, será negro. Todavía no me dejan, pero dame tiempo 😉
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