Un poquito más de mí

Archivo 24-9-17 23 37 14

Bueno, pues siguiendo con el juego que yo misma me he montado, hoy me toca desnudarme ante vosotros otro poquito más. Y pienso, a ver, ¿qué os podría contar acerca de mí que no sepáis ya?

Se me ocurre una cosita que todavía no sé si es una virtud o un defecto. Os dejo a vosotros mismos que juzguéis, si queréis hacerlo. Yo hace tiempo que dejé de hacer juicios de valores, así que… Es lo que hay y punto. Dicen las malas lenguas, sobre todo la de mi psiquiatra jajajaja, que soy una persona excesivamente metódica y exigente. Sobre todo exigente conmigo misma. Y lo cierto es que lleva razón, ¿qué queréis que os diga? Tengo un nivel de auto exigencia muy elevado, planifico todo lo que tiene que ver con el trabajo al detalle, y  me da muchísima rabia si no llego a alcanzar los objetivos propuestos. Que, por supuesto, tiene que rozar la excelencia. Alguna marca tenía que dejar en mi vida mi trabajo de números, donde la exactitud es primordial y el mínimo fallo trae consecuencias nefastas. Y mis objetivos son siempre muy ambiciosos, como os he dicho, a mí misma me exijo demasiado, tanto en el terreno laboral como en el personal. Hay veces que creo que soy superwoman, y… no lo soy, para naaaada.

Pero os cuento un secreto. Paradójicamente soy desordenada por naturaleza. Vivo dentro de un caos en el que me siento segura, porque dentro del desorden yo encuentro mi orden. Mil y una veces me he propuesto ser más ordenada, y mil y una veces he terminado fracasando, así que, ¿qué me queda? Pues aceptarme tal y como soy. Eso sí, siempre sé donde están las cosas, faltaría más jajajajaja. Si es que para mí es orden… aunque no lo parezca…

Por cierto, y dejando ya de desnudarme, hoy me he dado cuenta de que ya sois 990 personas maravillosas las que me estáis acompañando en mi particular aventura, que es mi mayor ilusión. Por eso había pensado ofreceros una sorpresa especial para cuando lleguemos a esa cifra tan bonita… ¡mil! Y fijaos que, teniendo una profesión en la que los números te saturan, fuera de ella no quiero verlos ni en pintura, así van las cuentas de mi casa, de culo… Pero ha dado la casualidad de que hoy me he fijado en esta cifra, ¿por casualidad? ¿O por causalidad? Bueno, el caso es que me apetece prepararos una sorpresa, que me habéis pillado generosa.

Os doy las gracias a todos y cada uno de las 990 maravillosas personas que ya sois parte de mi familia. Con vosotros es con quien puedo desnudar mi personalidad.

¡Besazos! ¡Se os quiere!

Publicado por Ana Centellas

Porque nunca es tarde para perseguir tus sueños y jamás hay que renunciar a ellos. Financiera de profesión, escritora de vocación. Aprendiendo a escribir, aprendiendo a vivir.

29 comentarios sobre “Un poquito más de mí

  1. Como uno de los 990 seguidores solo puedo decirte sin ánimo de pelotearte, que me encanta lo que escribes y como lo escribes. Insisto no es para hacerte la rosca, las cosas son así de sencillas. Yo tengo poco tiempo para leer blogs y me centro en los que he descubierto que me aportan mucho, como es el tuyo. Y punto. Ni 2000 palabras más. En cuanto al orden/desorden coincidimos yo vivo en el orden de mi caos y sin embargo, la gente me tiene por alguien muy ordenado. Será la imagen que doy, porque….
    Un abrazo Ana y buen finde.

    Le gusta a 1 persona

    1. Mil gracias Carlos, yo encantada de tenerte en la familia. Os voy leyendo cuando puedo, pero sé que se me escapan muchas de vuestras entradas. Si los días tuviesen más horas, podríamos leer más y ordenar un poquito el caos. Aunque nuestro caos tenga su orden… ¡Mil besos!

      Le gusta a 1 persona

  2. Un abrazo, amiga.
    Hay orden en el caos. En realidad, el concepto desorden es fruto de nuestra manía por tenerlo todo controlado, por ceñirnos a normas sencillas en vez de asomarnos a la complejidad y riqueza de un conjunto donde las relaciones no son evidentes. Si limitamos el campo vital de unos calzoncillos al conjunto de lugares {armario, entrepierna, cesta de la ropa sucia, lavadora} le estamos negando posibilidades interesantes como yacer sobre la lámpara después de una fiesta, ocultarse dentro del bolso de una señora infiel en fuga o lucir encima de los pantalones al más puro estilo superman. ¿Que interés tiene entonces el orden cuando las posibilidades más creativas escapan a sus dominios?
    ¡Caos el viva!
    Querida compañera:

    Le gusta a 4 personas

    1. Tenías que entrar en mi casa, María. Yo hago ya exposición de pelusas 😂😂😂 Y con dos chicos, imagínate. Me estoy acordando del comentario de Isra sobre los calzoncillos y, ahora que lo pienso, mi casa tiene muchos rincones donde poder encontrarlos 😂😂😂 y los calcetines ni te cuento!! ¡Gracias por estar siempre ahí!
      Besazos de luz

      Le gusta a 1 persona

  3. ¡Como sigas desnudándote pasarás muy pronto por sobre esa cifra, Ana! ¡Ja,ja,ja! Me temo que continúan las altas temperaturas por ahí…
    La verdad, que es muy agradable leerte y me alegra estar entre esos 990 lectores.
    ¡Felicidades y un enorme abrazo!

    Le gusta a 1 persona

  4. Sobre el desorden del orden o al revés, es esa teoría del Yin Yang, ambos son complementarios, ambos se necesitan y ambos forman un todo. Felicitaciones por tus novecientos noventa seguidores y ahí está mi manía, todo se puede decir con palabras, pues que así sea.

    Le gusta a 1 persona

  5. Heme aquí raudo a la escucha de esa desnudez temprana que celebro presenciar siquiera en clave de letra, cacofonía, poema, soliloquio o jeroglífico. Acertijo o teorema. Paradigma o tetrasíabo; paradoja o anatema; octonario o alejandrino.

    Y seguimos a la escucha hasta acabar despojando de todo velo encubierto a ese arquetipo que alumbra cuando ya no queda ropa, ni careta, ni antifaz, ni disfraz ni fingimiento. Hasta brillar por ti misma como se aprecia en la foto que insertaste generosa para la dicha de un loco.

    ¡¡’tas’ bellísima, chispas!!

    Le gusta a 1 persona

Replica a Poetas Nuevos Cancelar la respuesta